Condena de amor

Cual es la causa de esta pena
que me embriaga cada noche,
de este vacío insoportable
que de mis días hace infiernos.

Estoy tan preso por el odio,
por este amor que es mi lamento,
por esta condena que asfixia
que no me deja respirar.

De donde nace este dolor
que destierra mi alma al abismo,
cuyas lenguas de fuego me queman
y me hacen perecer.
 
Ya no contemplo la noche
por ser delirio de tu rostro,
el esbozo de un tormento
que se posó en mi lamento.

En el día aún te sueño
como parte de mi ensueño,
como farsa que en mi mente
se recrea con recelo.

Y este cuarto que es desvelo
que tolera cada llanto,
cada silencio sollozo,
cada respiro engorroso.
 
Tu recuerdo me persigue
como fiera por su presa,
haciendo de mi vida espesa
un calvario sin espera.

Me robaste cada puesta,
cada iluminar de luna,
cada amanecer brillante,
y mi confianza en el amor.