MÁXIMA

Sábelo hijo. Conmueve y nutre la palabra.
Bebe de su dignidad hasta dar a luz sabiduría y juicio
a las proyectada sombras de la mente humana.
Al aprender destronarás de tus comarcas
el atroz reinado de carencias,
y sus residentes nombres tempestuosos.
Así, nunca serás obrero de espejismos,
no tendrás principios frágiles, ni corporeizada nada.
Dignifícate. Ama la enseñanza. Siémbrate en su tierra.
Fructifica hasta ser multiplicada flama.
Estudiar será la hoguera que alumbre tu existencia
Y la equidad desbordará en los graneros de tu patria.
Instrúyete. Te librarás de la astuta y nefasta ignorancia.
NO ADQUIRIRAS ORO SIN ESFUERZOS,
NI CONSTANCIA.
JAMÁS CONSEGUIRÁ LA IGNAVIA ENNOBLECERTE
EL ALMA.

Beatriz Teresa Bustos