AROMAS

Te amo tanto que me hueles a mañanitas con aroma a pan recién horneado,
a rocíos frescos que orlan perfectamente con sus brillos cada pastito,
sabes a desayuno de leches tibias de ordeñes recientes,
e invitas a comerme el día desde el primer instante que amanezco contigo…
un halo impenetrable de sentimientos se forma cuando nos regalamos versos y rimas que logran que oídos ajenos viles y llenos de envidias quieran suicidarse,
desprestigiamos los polvos de los senderos con el andar de los besos
que nos conducen por esos prados que cuidamos como jardineros sibaritas
de flores pacientes, de tallos firmes y de raíces profundas …
te amo tanto que es una maldita calamidad el que te apartes dos segundos de mi mano,
me vuelvo un inservible ante el mandato de no quererte y me aprieto aun mas a vos,
y me ciño a tu cintura y nos vamos dos en uno despacito hacia la noche de despilfarros,
donde la luna con disimulo nos guiñará un ojo y será nuestra confidente
de arrebatos y galopes hermosos de placeres mil veces disfrutables,
mientras ,el sol desde la inmensidad seguirá enarbolando sus rayos
 para abanicar el incienso estelar ,para enamorarla otra vez,
 para invitarla a eclipsarse y no permitir
que seamos los únicos que tienen derecho al amor,
 que somos quienes sabemos vivir en las pupilas uno del otro,
 porque el universo…también tiene derecho a enamorarse…
entre los amarrucos nocturnos
 ya me vas oliendo a una nueva mañanita de aromas silvestres,
 y de a poco nos aprontamos para comernos otro día, para comernos de amor.
                                               El herrero