CUANDO LOS SÍMBOLOS SE CAMBIAN POR ALEGORÍAS

Las lecturas acrecientan las comparaciones,
entre los datos escritos de los que era receptor,
y las ideas innatas de su conjura de átomos.

Los aforismos y las citas herían su ánimo,
a la vez que lo empujaban a toda superación,
de la naturaleza virtuosa de los círculos.

Encontraba en aisladas sentencias,
la magnitud constante de cualquier yoidad.

Atrapado en un nudo de impresiones,
descritas a lo largo de todo suceso intrahistórico,
utiliza técnicas histriónicas en los contextos cotidianos.

Durante el descanso nocturno que preceden sus actividades,
viaja constantemente, al sueño lúcido de las experiencias,
invadiendo sus constantes vitales,
con un universo axiológico de sentimientos.

Se acurruca en el ventrículo de un corazón ajeno,
hermanando la expresión del ritmo inequívoco,
entre los suspiros de cálidos aromas.

Confundidas las médulas con el latir que lo justifica,
es un necesitado de compartir la misma vida